Viajar en tren por Europa es una de las formas más cómodas y escénicas de moverse entre ciudades y países. El problema es que, si compras los billetes a última hora o sin conocer las opciones, los precios pueden subir tanto como los de un avión.
La buena noticia es que hay muchas maneras de pagar menos sin renunciar a la calidad del viaje. Desde planificar con antelación y elegir bien el momento de compra, hasta usar pases especiales o aprovechar ofertas regionales, las oportunidades para ahorrar están ahí si sabes dónde mirar.
En esta guía encontrarás estrategias claras y prácticas para reducir gastos en tus trayectos ferroviarios. Te contaremos cómo conseguir mejores tarifas comprando con tiempo, cuándo conviene un pase como Interrail o Eurail, y qué billetes regionales pueden ahorrarte bastante dinero sin sacrificar comodidad.
Comprar los billetes con antelación para conseguir mejores tarifas

En la mayoría de países europeos, los trenes de larga distancia ofrecen tarifas promocionales que aparecen semanas antes del viaje. Compañías como SNCF en Francia, DB en Alemania, Trenitalia en Italia o Renfe en España publican billetes a precios reducidos que, a medida que se acercan las fechas, suben de forma considerable. Comprar con antelación te permite asegurar la mejor tarifa y, en muchos casos, obtener asientos en horarios más convenientes.
En este sentido, el margen óptimo varía según el país y la ruta, pero como regla general, reservar entre uno y tres meses antes ofrece los precios más competitivos. Incluso en trayectos internacionales como París-Bruselas o Milán-Zúrich, anticiparte puede significar pagar la mitad de lo que costaría a última hora. Eso sí, estas tarifas suelen ser no reembolsables o con cambios limitados, por lo que conviene tener clara la fecha de viaje antes de comprarlas.
Usar pases de tren como Interrail o Eurail cuando conviene
Los pases Interrail (para residentes europeos) y Eurail (para no europeos) ofrecen viajes ilimitados durante un número determinado de días, dentro de un periodo concreto. Son útiles si planeas moverte con frecuencia entre varios países o hacer trayectos largos que, comprados por separado, saldrían más caros. Además, permiten ajustar el recorrido en cualquier momento y adaptarlo a lo que vaya surgiendo durante el viaje.
Sin embargo, no siempre son la opción más barata. Ciertos trenes rápidos o internacionales exigen reservar asiento pagando un extra, con disponibilidad reducida para quienes viajan con pase. Esto puede aumentar el gasto y reducir la flexibilidad. Por eso, conviene comparar el coste del pase con el de billetes individuales para tu itinerario concreto. Si tus desplazamientos incluyen varios días seguidos de viaje o distancias largas, el pase puede ahorrarte dinero; pero para rutas más cortas o con pocos trayectos, probablemente no sea necesario.
Aprovechar billetes y pases regionales de un día

Muchos países europeos ofrecen billetes especiales para viajar de forma ilimitada en trenes regionales durante un día, a un precio fijo. En Alemania, por ejemplo, el Länder-Ticket permite recorrer un estado completo, mientras que el Quer-durchs-Land cubre todo el país en trenes regionales por una tarifa muy reducida. En Suiza existe el Saver Day Pass, que permite obtener rebajas importantes al adquirirlo con tiempo.
En este caso, estos pases normalmente incluyen desplazamientos sin límite durante un día, lo que facilita recorrer varias ciudades próximas o desplazarse entre puntos sin apuro. Aunque no incluyen trenes de alta velocidad, la diferencia de tiempo no siempre es grande en distancias cortas, y el ahorro es considerable. También son ideales para grupos, ya que muchos ofrecen descuentos adicionales si viajas acompañado. Antes de planificar, revisa la web de la compañía ferroviaria local, ya que estas ofertas pueden variar según la temporada y a veces incluyen incluso otros transportes como tranvías o autobuses.
Sacar partido a tarjetas de descuento nacionales
Muchos países europeos ofrecen tarjetas de descuento que pueden reducir de forma considerable el precio de los billetes, especialmente si viajas varias veces por año o durante una estancia prolongada. En Alemania, la BahnCard ofrece opciones que van desde el 25% hasta el 50% de descuento en casi todos los billetes, incluidos los de alta velocidad. Francia cuenta con la Carte Avantage, que garantiza precios máximos y descuentos adicionales en determinados trayectos, mientras que en el Reino Unido las Railcards reducen tarifas hasta un tercio.
Por otro lado, el gasto inicial se recupera pronto cuando se usan en distintos trayectos. En Austria, la Vorteilscard es una buena inversión para quienes recorren el país en tren, y en Suiza, el Halbtax permite pagar la mitad del precio estándar en la mayoría de servicios. Conviene estimar cuántos desplazamientos realizarás y en qué rutas, para verificar si la inversión merece la pena.
Viajar con operadores low-cost y alternativas más baratas

En tiempos recientes, algunos países han incorporado trenes económicos con precios más atractivos que los servicios convencionales. Compañías como OUIGO en Francia, Avlo e Iryo en España, Italo en Italia o FlixTrain en Alemania ofrecen trayectos extensos por tarifas cercanas a las de un viaje en autobús. En general, cuentan con menos prestaciones a bordo y restricciones de equipaje, aunque mantienen velocidad aceptable y comodidad suficiente.
La clave para aprovecharlos está en reservar con antelación, ya que las plazas más baratas se agotan rápido. También es importante comparar horarios y condiciones, porque algunos low-cost utilizan estaciones secundarias, lo que puede implicar más tiempo de traslado. Si tu prioridad es el precio y no te importa ajustar un poco la logística, estos trenes pueden ahorrarte una parte importante del presupuesto de viaje.
Evitar recargos con trenes regionales y combinaciones inteligentes
En rutas donde los trenes de alta velocidad son caros, una estrategia efectiva es combinar tramos en trenes regionales con uno rápido para el segmento más largo o crítico en tiempo. Esto reduce el coste final sin sacrificar demasiado la duración total del trayecto. Además, los trenes regionales suelen permitir viajar sin reserva de asiento, evitando cargos adicionales.
Por ejemplo, en Italia, combinar un regional hasta una ciudad intermedia y luego tomar un Frecciarossa o Italo puede costar bastante menos que hacer el trayecto completo en alta velocidad. En Francia y Alemania esta estrategia resulta práctica, sobre todo en recorridos con distintas alternativas de enlace. Planificar con antelación y usar buscadores que permitan seleccionar “solo trenes regionales” es clave para encontrar las combinaciones más rentables.
Usar trenes nocturnos para ahorrar alojamiento
Los trenes nocturnos son una forma eficiente de ahorrar en alojamiento mientras recorres largas distancias. Trenes como el Nightjet de ÖBB enlazan ciudades como Viena, Berlín, Ámsterdam, Zúrich o Roma, con alternativas que incluyen desde asientos reclinables hasta camarotes privados con ducha. Aunque la tarifa pueda parecer más alta que la de un billete normal, debes considerar que incluye una noche de transporte y hospedaje.
De esta forma, reservar con antelación es fundamental para conseguir las mejores tarifas y asegurarte de obtener la categoría de alojamiento que prefieras. Las literas suelen ofrecer un buen equilibrio entre precio y comodidad, mientras que los camarotes son más costosos pero garantizan privacidad. Además de ahorrar, viajar de noche te permite aprovechar mejor el día en tu destino, llegando por la mañana listo para empezar a explorar.
Buscar horarios y días con mejores precios

El momento en que viajas puede influir tanto en el precio del billete como la ruta que elijas. En la mayoría de los países europeos, los trenes son más caros en horas punta, coincidiendo con los desplazamientos laborales, y en fines de semana, cuando hay más demanda turística. Evitar estos momentos y optar por horarios menos solicitados puede suponer un ahorro importante sin comprometer la calidad del viaje.
Por otra parte, los martes, miércoles y jueves suelen ofrecer tarifas más bajas, especialmente a media mañana o a última hora de la noche. Si tienes flexibilidad, utilizar buscadores que permitan comparar precios por día y hora te ayudará a encontrar la mejor opción. También es recomendable configurar alertas de precio en rutas específicas, para recibir avisos cuando aparezcan ofertas o descuentos temporales. Esta estrategia funciona especialmente bien en trenes de alta velocidad o internacionales, donde las variaciones de precio pueden ser significativas.
Herramientas y apps para encontrar tarifas bajas
Contar con las herramientas adecuadas facilita localizar las mejores ofertas sin perder tiempo buscando en múltiples webs. Estas son algunas de las más útiles:
- DB Navigator: La aplicación oficial de Deutsche Bahn permite buscar y reservar billetes en Alemania y otros países europeos. Incluye opciones para ver combinaciones regionales y filtrar por precios más bajos, incluso en rutas internacionales.
- SNCF Connect: Ideal para viajes en Francia y conexiones internacionales desde este país. Ofrece alertas de precio, opciones low-cost como OUIGO y la posibilidad de ver el calendario de tarifas más económicas para cada ruta.
- Trainline: Plataforma que centraliza horarios y precios de múltiples operadores europeos. Permite comparar en un solo lugar y, en muchos casos, reservar sin comisiones adicionales, lo que agiliza el proceso de compra.
- Rail Planner: Aplicación oficial de Interrail y Eurail, práctica para organizar itinerarios cuando se viaja con pase. Muestra rutas, horarios y trenes que requieren reserva, ayudando a optimizar los días de uso del pase.
- ÖBB Scotty: Herramienta de los Ferrocarriles Austriacos que muestra horarios y tarifas en Austria y países vecinos. También ofrece información sobre trenes nocturnos y conexiones internacionales del servicio Nightjet.